Bill Skarsgård, ¿cómo se enfrenta un actor a un papel como el de Pennywise?

En 1986, el ya por entonces célebre Stephen King lanzó su nueva novela, una truculenta historia ubicada en Derry, pueblo ficticio del estado de Maine, donde normalmente tenían lugar sus relatos. Allí, cada veintisiete años, una tragedia tenía lugar, mezclada con la desaparición misteriosa de muchos niños pequeños. El libro se titulaba Eso, It en su original en inglés, y supuso una de las cumbres literarias del escritor estadounidense, llegando a ser considerada por muchos como una de sus mejores novelas, de las más oscuras pero también de las más esperanzadoras. Y es que en It era el poder del amor y la amistad lo único que lograba vencer al monstruo.

Vida después de la muerte, experiencias que dan que pensar

Una de las preguntas que la Humanidad se ha hecho desde hace tiempo es adónde vamos cuando la vida se acaba. Este misterio es uno de los más grandes a los que hemos tenido que enfrentarnos y aunque hay muchísimos científicos que se han empleado a fondo por desvelarlo en los últimos tiempos, la respuesta sigue siendo ambigua.

Parece que desde un punto de vista biológico, la muerte es el final de toda vida para nosotros, pero ¿qué ocurre con nuestra alma, con nuestro espíritu, en el caso de que exista algo así? Se ha teorizado muchísimo sobre lo que hay más allá de la muerte, tanto por científicos como por filósofos, gente religiosa y mística. En muchas religiones hay una especie de vida después de la vida, en un lugar apacible o en otro muy poco agradable, como serían el cielo y el infierno cristianos.

Esos lugares han servido también como recompensa para quien se haya portado bien o mal durante la vida, una manera de conseguir que la gente siguiera esos dogmas. Sin embargo, los que más cerca han estado de explicar qué hay más allá de la muerte son los que han sufrido experiencias cercanas a la muerte, llamadas ECM.